La niña llegará a pedirle al santo
una palabra que lo explique todo
no querrá cuentos ni parábolas antiguas
exigirá apenas una pista divina
que pueda revelar qué es la verdad.
Pero el santo la verá que es solo una niña
que busca entender, ser amada y amar,
y aunque notará en su interés que es urgente y sincero,
no podrá más que dejar los labios sellados,
regalarle una sonrisa complaciente
y poner en sus manos una flor.
Categorías:Cuentos y Poesía
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